domingo, 9 de septiembre de 2012

Cromosoma Z

Se ha creído erróneamente que lo que nos hace humanos es la inteligencia, de la cual se dice y defiende es el proceso psíquico superior más avanzado de la naturaleza. No en vano nos quemamos las cejas cada día intentando demostrar que realmente somos los más inteligentes; pero, ¿lo somos?. Un estudio señalaba que la inteligencia no era el distintivo humano por excelencia, la tienen incluso las amebas como característica esencial, sino la autodestrucción de él mismo a través de la destrucción de otro ser humano. De ahí que la actualmente famosa herramienta de «autoestima a través del sufrimiento ajeno» alias Facebook haya conseguido consolidar una vez más su «novedoso» modelo de negocio. Reportes recientes apuntan que Facebook esta cada vez más cerca de la comunidad como ninguna otra herramienta antes. El experto en el fenómeno A. N. Curtis señala que «es como la pobreza pero elevada a una potencia infinita; llega a cada rincón del mundo, bien como un sello de clase - en las pobres - o como una amenaza de clase - para los ricos -. Aunque, indistintamente, sirve para el mismo propósito». «Todos los que alguna vez han pertenecido a este complejo social reconocen que han sido felices durante su permanencia, y que volverían a repetir la experiencia de volver a necesitar verdadero y eficaz apoyo moral». Además como señala el mismo Curtis «pensar que esto se acabará pronto es un poco tonto; cuando llegue ese día, lloverán manzanas» y termina «no sólo es un problema de autoestima sino de personas que no tienen mucha idea de que va la vida».

Conocido coloquialmente como el «muro divino», el modelo Facebook, dicen sus más fieles usuarios, ha encontrado el equilibrio natural entre la democracia y el comunismo. Desde los primitivos «likes» hasta los actuales «estas-como-para» cada persona en Facebook puede lograr la felicidad absoluta si ese es su fin. Según la propia compañía el modelo de negocio asegura que el usuario pueda encontrar al ser humano inmediatamente inferior a él y por extensión a todos los demás debajo de ese último usuario e inmediatamente pasar a ser el vértice de la pirámide moral alimenticia. Desde esta posición, añaden, el usuario es capaz de interactuar con los inferiores a él a través de tres herramientas principales, la comparación, la asignación de defectos y el bullying. Todo ello en un ambiente totalmente dinámico. No limitándose a las imágenes, videos y actualizaciones vía texto sino haciendo uso de las últimas actualizaciones que la compañía ha presentado en el evento mundial «La gran convención Facebook y por que odiamos a Curtis». De ellas destaca el Fancy Party, de la que un usuario, notablemente feliz, ha dicho «es lo más estupendo que una compañía ha creado, no sólo puedo ahora ser superior virtualmente sino también en la vida real; hasta hace unos años me sentía lo peor de la tierra, era infeliz y no tenía un sólo amigo. Había tratado de suicidarme seis veces antes que la primera invitación a la beta de Facebook llegara. Y ahora, mírame, tengo millones de amigos. Se lo recomiendo a todos». Sobre esto, Curtis en el prólogo de la edición dos millones de esta revista en su edición en papel dice «Se le hace creer que el paraíso esta en la tierra, pero no se le hace notar que el sistema tiene un error, que siempre hay alguien que no podrá encontrar alguien inferior a él.» «De hecho el sistema es tan falso que la elección de los inferiores a alguien es totalmente arbitraria; pero realmente ese no es el problema».

¿Es entonces Facebook el mecanismo de felicidad por excelencia?. La representante de la compañía Dorkaz Microsoft dice que «al contrario de las opiniones de ciertos expertos, Facebook no sólo ha demostrado que es capaz de brindar la felicidad que muchas personas requieren y necesitan para seguir viviendo, sino que aquellas que aparentemente son felices también han encontrado un lugar para incrementar exponencialmente esa felicidad; deberían reconocer que hemos evitado los suicidios». A la pregunta de que opina sobre el señor Curtis ha respondido elocuentemente «Gilipollas». Sin embargo los últimos análisis de compañías independientes como Mass-Suicide han señalado que las tasas de suicidios se incrementaron alarmantemente en un 300% desde el inicio de las operaciones de la red social. «Curiosamente se trata de personas por debajo de las pirámides estándar; personas con defectos no-corregibles por cirugía y con ciertas limitantes como la timidez, la pasión por la lectura o la búsqueda de libertad; es preocupante».

A su turno el autor de «Ensayo sobre Facebook o porqué somos todos gilipollas» A. N. Curtis, ha señalado sobre el modelo de negocio de la compañía «desde el momento que empiezas a creer que esta bien esta mal». A la pregunta de si se refiere al capítulo Infelicidad Colectiva de su libro responde «cuando se parte del supuesto de que alguien será feliz si y sólo si está por encima de alguien ocurren dos cosas, o que estás colocado arriba de la pirámide general o estas debajo de toda la pirámide; los niveles intermedios son una farsa, ahí sólo hay infelicidad.» Y concluye «al final no parece que seamos los más inteligentes después de todo.»

Finalmente aunque apoyemos abiertamente la postura del señor A. N. Curtis (¡Tenemos todos sus libros!) debemos señalar que en Cromosoma Z no tenemos ningún conflicto de intereses al escribir este artículo. Somos un medio independiente preocupado por la naturaleza del éxito del que es víctima Facebook, y por ser de interés mundial tratamos de cubrir lo más que podamos. Por lo que los invitamos a seguir confiando en nosotros, y no olvide comprar la suscripción por diez años pinchando el link junto al icono Facebook. Por cierto síganos, y conviértase en nuestro amigo número diez millones.









[Seis meses después. En el video el tema de inicio de Serial Experiments Lain, un señor anime; gracias Ludo por la recomendación. Y en la foto Mila.]

2 comentarios:

  1. Ese Curtis es un buen antagonista bastante cínico.

    PD 1 por qué eres tan raro...
    PD 2 ... Y aun así me caes bien?

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